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junio 29, 2011

DOÑA HILLARY Y LOS CHANGUITOS

por Martín Vélez

Las imágenes del evento muestran una expresión de Hillary Clinton bastante reveladora: el codo recargado en la mesa, el brazo flexionado para que la cabeza se apoyara en la mano, en la cara un mohín de enfado inocultable. La Secretaria de Estado del gobierno de Obama había llegado tarde, hora y media, escuchaba impaciente los últimos discursos de los presidentes centroamericanos.

Estaba presente también Felipe Calderón. Era el día anterior a su encuentro con Sicilia. Tal vez por ello, la Conferencia Internacional de Apoyo a la Seguridad de Centroamérica, con sede en Guatemala,  no tuvo  amplia cobertura en los medios mexicanos. Al día siguiente, jueves 23 de Junio, los medios mexicanos aprovecharían la reunión con Sicilia para un lavado de imagen, que ya  le hacía falta, a la maltrecha y menguante figura de Felipe Calderón. El evento de Guatemala pasó casi de noche.

Algunos medios resaltaron sólo la postura, valiente por supuesto,  del michoacano. Reportaron aquellas palabras  de Calderón, que Hillary Clinton escuchaba  con desgano: que contra el narco no se pide caridad, sino un apoyo fuerte y decidido (algunos medios reportaron que Calderón pidió una cifra concreta, 35000 millones de dólares); que no había correspondencia entre los compromisos antinarco y los apoyos reales. En fin, Felipe Calderón hizo eco de la solicitud de los otros presidentes bananeros: dinero, dinero y más dinero. Lo pidió en el tono regañón que ya le conocemos tanto.

Pero la respuesta de doña Hillary llegó muy rápida, muy certera, y sin la vaselina del lenguaje diplomático: si quieren dinero, cóbrenle a los ricos un impuesto antinarco, de Estados Unidos ya no esperen más.

Caramba, doña Hillary, de dónde sacó usted esos aires tan pejunos. ¿Cómo que cobrar impuestos a los ricos? Se me hace que usted ya está leyendo el Regeneración, el periódico que reparten las morenas y morenos de AMLO. ¿Cómo se le ocurre que los ricos (los muy, muy ricos) deben pagar impuestos? ¡Ni que fueran viles clasemedieros, contribuyentes cautivos!

Con su respuesta seca y terminante, Hillary Clinton puso en su lugar a los presidentes de las Banana Republic, que piden una solución externa a problemas de larga incubación interna. Particularmente, en el caso de México, es un hecho conocido que las grandes empresas no pagan un centavo de impuestos. Mientras tanto, gozan el privilegio de un mercado monopólico de precios inflados a su libre arbitrio.  Por eso la postura de Calderón es insostenible en los foros internacionales, al punto en el que el propio gobierno gringo da muestras de impaciencia y hartazgo.

Fijada su postura, Hillary Clinton terminó la reunión de Guatemala dejando a los pedinches con un palmo de narices. Este tecleador imagina la salida airada de la güera Clinton, azotando la puerta, no sin antes haber dicho "take monkeys your banana" ( tomen changos su banana ).


junio 25, 2011

El desastre en México y las “agendas” del poder

Es injustificable que haya tanta pobreza en México, cuando en realidad el territorio nacional posee recursos suficientes para que no existiera ese flagelo. Cifras oficiales dan cuenta de que 54.8 millones de mexicanos están en esa condición, cantidad demasiado alta para una nación con amplias expectativas de formar parte de los llamados países del primer mundo. Si tuviéramos un Estado como el japonés, el alemán o el holandés, estaríamos en el nivel de potencia económica, pero como somos dirigidos por un puñado de tecnócratas inescrupulosos, dependientes además de la superpotencia del Norte, nuestra realidad es la de una nación tercermundista con amplias posibilidades de seguir descendiendo al nivel de un país africano.

Ciertamente, ha sido una desgracia para México la vecindad con Estados Unidos, cuya voracidad no tiene parangón con ningún otro imperio a lo largo de la historia de la humanidad. Pero más lamentable es que sólo en muy cortos periodos de tiempo el Estado mexicano ha tenido la fortaleza y capacidad para enfrentar las embestidas expansionistas de nuestros vecinos.

A partir de la instauración del neoliberalismo, la entrega de nuestros recursos a inversionistas extranjeros ha sido el común denominador, decisión reaccionaria que ha influido en un más acelerado proceso de empobrecimiento, como lo demuestran las estadísticas y la propia realidad nacional. Volvimos a los tiempos del porfiriato, cuando empresarios extranjeros tenían más derechos y garantías que los propios mexicanos.

Sin embargo, según Felipe Calderón, "estamos resolviendo los mexicanos los problemas ancestrales del país", pues los municipios más pobres "han mejorado su situación". Es obvio que vive muy alejado de la realidad, rodeado de cientos de guaruras que le impiden conocer algo de los problemas ancestrales que agobian a la mitad de la población del país. Aun cuando haya visitado algunas regiones marginadas de Guerrero, Oaxaca y Chiapas, lo ha hecho como si llevara una gruesa venda en los ojos, por eso, sin recato alguno, hace declaraciones tan absurdas. Lo cierto es que la pobreza en dichos estados ha ido en aumento, y en otros, donde no era tan aguda, como en Durango, Zacatecas y Nayarit, ahora se ha convertido en un lastre social de graves consecuencias, entre las que destaca el aumento de la violencia ligada a la delincuencia juvenil, pues la mayoría de delincuentes y víctimas de la violencia es joven.

Afirma Calderón que la pobreza durante su "administración" se combate con hechos, y puso como ejemplo la subestación eléctrica de Chemax, Yucatán. Y lo dice sin parar mientes en que envió a la pobreza a más de 40 mil trabajadores de la extinta compañía Luz y Fuerza del Centro con tal de privatizar el sector y hacer un lucrativo negocio con la fibra óptica, que costó al erario nacional la friolera de 30 mil millones de pesos. Los hechos a los que hace referencia el inquilino de Los Pinos no encajan con una realidad ominosa que amenaza convertirse en apocalíptica, de continuar como vamos. De ahí lo equivocado del Partido Revolucionario Institucional (PRI) al pretender relevar al Partido Acción Nacional (PAN) en la casa presidencial, siguiendo la misma política neoliberal y neoporfirista que el propio partido tricolor puso en marcha en 1983.

Así como Humberto Moreira puntualiza que "nada justifica la urgencia del PAN" para aprobar cuanto antes una reforma sustancial a la Ley Federal del Trabajo, también es válido señalar lo mismo en lo que se refiere a la aprobación inmediata de la iniciativa del tricolor de reforma a la Ley de Seguridad Nacional, que daría facultades extralegales al presidente de la República para utilizar a las Fuerzas Armadas contraviniendo los preceptos constitucionales. Al PRI le urge que se apruebe dicha iniciativa, incluso violando el reglamento de la Cámara de Diputados, pero Moreira opina, en lo referente a la iniciativa panista, que "se puede llevar al otro periodo de sesiones, es decir, no hay algo que implique que si no sale ahorita tiene algún problema para el país". Entonces ¿por qué la prisa de los priistas en el Congreso para que se apruebe ahora la reforma a la Ley de Seguridad Nacional?

Lo que les interesa a ambos partidos ligados a la oligarquía son sus propias agendas, no el interés del país, flagelado por gravísimos problemas que la oligarquía ha propiciado con sus ambiciones irracionales, pues no hay explicación alguna para amasar tanta riqueza en medio de tanta pobreza. Así como vamos, tendrá que llegar el día en que el mercado interno se reduzca a su mínima expresión, con los problemas colaterales que tal situación acarrearía. Esto no parece importar a la minoría que se beneficia todavía con un modelo económico excluyente como ningún otro, al fin que sus riquezas ya están a buen recaudo en el extranjero. Con todo, no se ponen a pensar que también podría llegar la hora en que ni ellos mismos estarían a salvo, como ocurrió con el empresario lagunero Carlos Ignacio Valdés Berlanga.

*Periodista

Fuente: Contralínea 232 / 08 de mayo de 2011




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Corrupción vs seguridad nacional



Decomiso de armas a Zetas en Coahuila.

Jesusa Cervantes

MÉXICO, DF, 3 de junio (apro).- El crimen organizado busca países corruptos, con leyes mal confeccionadas que permitan el lavado de dinero, con funcionarios deshonestos que elaboren averiguaciones previas plagadas de inconsistencias y una clase política fácil de comprar.

México es un claro ejemplo de ello. La corrupción y ambición de algunos funcionarios les ha puesto una venda que les impiden entender el riesgo para el país y su población.

Ejemplos hay muchos. Ahí está el caso de cientos de armas provenientes de Estados Unidos que tanto escándalo generó en los principales círculos políticos, entre ellos la Cámara de Diputados, donde los legisladores se indignaron tanto que decidieron llamar a comparecer a los titulares de la Procuraduría General de la República (PGR), del Sistema de Administración Tributaria (SAT), así como al de Aduanas.

Las comparecencias nunca se llevaron a cabo, pero sí hubo declaraciones gubernamentales en donde se sostenía el total desconocimiento del famoso operativo Rápido y furioso del país vecino.

Las armas pasaron por algunas de las 49 aduanas que hay en el país y, si eran ilegales, es decir, no contaban con factura o documentación que acreditara su proceder, pues alguien tuvo que dar la orden de dejarlas pasar. Ejemplo de corrupción que abrió aún más la puerta a que algunas personas fueran ejecutadas con ese arsenal.

Uno más, Carlos Cabal Peniche, el empresario que había lavado dinero, que apoyó las campañas electorales del entonces candidato al gobierno de Tabasco, Roberto Madrazo, y la presidencial de Ernesto Zedillo, con millonarias sumas de dinero, fue detenido luego de largos meses en Melbourne, Australia. Meses para lograr su extradición y, cuando llegó al país, pudo librar fácilmente la cárcel, pues los cargos en su contra estaban mal elaborados.

Simple corrupción, pues alguien tuvo que ordenar errores en una averiguación previa tan importante, ya que existen autoridades con los conocimientos suficientes para confeccionar expedientes impecables.

Un ejemplo más. El Instituto Nacional de Migración (INM). Desde hace décadas, es vox populi que los agentes migratorios vejan a los extranjeros en el sur, que los roban y recientemente, nos hemos enterado que han entregado migrantes a los cárteles de la droga.

Simple corrupción de los agentes migratorios, de los delegados, pero más aún, desde las propias oficinas centrales del INM en la Ciudad de México, en que se ha sabido que por cada extranjero, con el fin de permitirles su paso por México o su estancia en el país, cobran miles de pesos o de dólares, según sea el caso. Simple corrupción.

Los alcances son de un peligro extremo para el país, pues con unas "fronteras porosas", por donde entra todo, droga, indocumentados, contrabando; con unos centros migratorios en donde se abusa del indocumentado; con unas oficinas centrales en donde la aplicación de la ley languidece o, todavía peor, donde se elaboran reglamentos maleables que permiten el ingreso de extranjeros sin verificación alguna de quiénes son o protocolos que permitan darles un seguimiento, la seguridad nacional se encuentra en peligro. Y todo por corrupción.

Según el Manual del terrorismo elaborado por la Escuela de las Américas, hay varios tipos de terrorismo, entre ellos está la clasificación del narcoterrorista.

"Por años el traficar en drogas ha sido ligado exclusivamente a elementos criminales profesionales. En años más recientes una nueva influencia se ha movido hacia el mundo de las drogas, sujetos motivados no por la avaricia, sino por una determinación para desestabilizar la sociedad occidental. Su método: intercambiar armas por drogas. El operador central: Bulgaria. Hay pruebas establecidas de que el gobierno de Cuba facilita el narcotráfico hacia Estados Unidos, permitiendo que los narcotraficantes usen puertos cubanos para desembarcar los barcos de Colombia. Como pago al gobierno de Cuba, los traficantes entonces llevan las armas para entrega posterior a grupos, como por ejemplo el M-19. Adicionalmente estudios han demostrado que la FARC, una organización terrorista Colombiana, utiliza la venta de drogas como su método principal para financiar sus actividades terroristas", se detalla en el manual.

En el INM ha habido operativos policiacos en busca de funcionarios de quienes se sospecha han permitido el ingreso de extranjeros que realizan actividades ilícitas para beneficiar la ideología de su país.

Si la hipótesis es que en el INM hay funcionarios corruptos que por unos pesos abren la puerta sin investigar a extranjeros, incluso de países considerados de riesgo y, si por otro lado, hay aduanas por donde entran grandes cantidades de armas a cambio de otros pesos más y, si además se suma el ingrediente de la fuerte presencia de cárteles de la droga, entonces el peligro de la corrupción es exponencial.

El 12 de diciembre de 2003, las Naciones Unidas (ONU) alertaron sobre el surgimiento de una criminalidad organizada transnacional capaz de poner en jaque la seguridad y economía de algunos países.

El 12 de diciembre de 2003, se aprobó en Bruselas, Bélgica, la Estrategia de Seguridad Europea, en el que se incluyó al crimen organizado como una de las cinco amenazas más importantes para la seguridad mundial "en las próximas décadas".

La estrategia, elaborada por el español Javier Solana, advertía algo que en México ya suena conocido: la posibilidad de futuras conexiones entre el crimen organizado y las otras cuatro amenazas: el terrorismo internacional, la proliferación de armas de destrucción masiva, los conflictos regionales y el incremento de "Estados fallidos".

La advertencia de hace siete años de Solana parece tomar forma, poco a poco, en México.

La secretaria de Seguridad Interna estadunidense, Janet Naplitano, ya dijo que su gobierno ha pensado en la posibilidad de que el crimen organizado se una a algún grupo terrorista, en especial Al Qaeda.

La posibilidad existe y si no, basta leer los periódicos para saber lo que el gobierno a veces quiere ocultar, como por ejemplo:

En México hay funcionarios corruptos, crimen organizado que va en ascenso, organizaciones criminales que han traspasado fronteras, "fronteras porosas" y armas ilegales.

Nada menos la semana pasada se encontró en Coahuila un arsenal perteneciente supuestamente a Los Zetas, consistente en 154 armas largas, siete cortas, un lanzacohetes, cuatro grandas para morteros, dos ballestas, seis cohetes y miles de cargadores y cartuchos. Nuevamente, las "aduanas porosas".

Quizá sea una exageración, pero de que hay la posibilidad de que una de las vertientes señaladas por Javier Solana se dé, la hay.

Dato: Y como muestra de que los cárteles mexicanos han traspasado fronteras, aquí un par de apuntes. En Argentina hay dos investigaciones sobre el cártel de Sinaloa encabezado por Joaquín El Chapo Guzmán; ya estableció en Argentina una base patrimonial; levantó dos bases de producción, es decir, procesamiento de químicos precursores de drogas sintéticas y cocaína; además, estableció ya tres bases de distribución de drogas, armas y personas. Esas bases están en las provincias de Santa Fe, Chaco, Formosa, Misiones y en ciudades como Buenos Aires. Lo anterior forma parte de las indagaciones que ha logrado llevar a cabo el doctor Edgardo Buscaglia, especialista en temas de narcotráfico.

Comentarios: mjcervantes@proceso.com.mx


junio 24, 2011

INCREIBLE EN LA PROFECO.

por CESAR ESCOBAR RIOS

 
JOVENES.
 
ESTO ME SUCEDIO, ACUDI A LAS INSTALACIONES DE LA PROFECO , CON LA INTENCION DE DENUNCIAR EL INCUMPLIMIENTO DE LA GARANTIA DE UN PROVEEDOR  ( TIENE TRES MESES QUE LLEVE MI LAP TOP POR FALLAS Y DICEN QUE ERA NUEVA.++  SAMS CLUB ++) Y ME ENCONTRE QUE EN MAZATLAN SOLO HAY OFICINAS DE PROFECO PARA ATENDER OTRO TIPO DE QUEJAS, QUE TODAVIA NO SE PONIAN DE ACUERDO CON EL MUNICIPIO PARA RECIBIR DENUNCIAS, QUE SI DECEABA PRESENTAR UNA DENUNCIA DEBERIA DE ACUDIR A LAS OFICINAS DE LA PROFECO EN CULIACAN, TODAVIA INCREDULO INGRESE A INTERNET Y BUSQUE EL TELEFONO DE  PROFECO EN LA CIUDAD DE MEXICO Y ME CONTESTARON LO MISMO QUE DEBERIA REALIZAR MI DENUNCIA EN CULIACAN SINALOA.
 
LE COMENTE AL EMPLEADO QUE SI DEBERIA VIAJAR 220 KILOMETROS PARA HACER UNA DENUNCIA, Y ME CONTESTO ESE ES PROBLEMA SUYO , YO SOLO CUMPLO CON DECIRLE.
 
SERA PARA PROMOCIONAR EL TURISMO TAN DECAIDO EN LA CAPITAL SINALOENSE.
 
COMO LE HARAN LOS TURISTAS QUE VIENEN A DESCANSAR A MAZATLAN.
 
SEREMOS CIUDADANOS DE CUARTA CATEGORIA, YA QUE MAZATLAN ES UNA DE LAS TRES CIUDADES MAS GRANDES DE SINALOA. Y POSIBLEMENTE UNO DE LOS PUERTOS MEXICANOS MAS CONOCIDOS EN EL MUNDO.
 
AHI SE LOS DEJO DE TAREA, COMO ESTAN LAS COSAS EN NUESTRO QUERIDO PUERTO.
 
SALUDOS.
 
BUEN DIA..
 

junio 22, 2011

UNA FRASE PARA SICILIA.


Martín Vélez
Es imposible registrar los nombres de los muertos de la guerra de Calderón, que ya no es guerra, según él mismo.  De hecho la mayoría de los muertos de la guerra-no guerra no se llamaban de ningún modo. Eran, en vida, hombres y mujeres sin nombre. Y la muerte no les ha quitado su condición anónima.

En las fosas clandestinas que se  multiplican por el país, sacrificados y enterrados al mayoreo, los restos humanos son extraídos con trascabo. Es el mejor pago a sus vidas despreciadas y sus muertes despreciables. En vida, ya estaban muertos. Lo demuestra así el hecho de que nadie reclama sus cuerpos, o las partes de sus cuerpos que el trascabo dejó reconocibles.

La fosa común ha sido el destino de gran parte de los muertos, que sí son muertos, de esta guerra, que no es guerra. Diversos reportes periodísticos hablan de una cifra de 12,000 fallecidos no identificados.
 
Pero otros fallecidos no han padecido la otra muerte que es el olvido. Ellos mismos, víctimas también de la guerra tonta, tuvieron un nombre, o fueron hijos de padres que, teniendo un nombre, han tenido también el valor de echar en cara del gobierno los costos de su criminal estupidez.

Víctimas relevantes del crimen organizado (que es tal, a condición de gozar de protección oficial) han obligado al gobierno a enseñar la cara ante sus padres. Así pues, el señor Calderón ha tenido, a lo largo del río sangriento de su sexenio, diversos encuentros con los padres de las víctimas de su guerra (y dale, ¡que no es guerra!)

Esos encuentros entre la estulta arrogancia gubernamental y la agraviada dignidad, la entereza dolida de los padres, son recordadas por las frases que estos padres, dignos, han azotado en la cara del criminal. Veamos:

¡NO TIENEN MADRE!
Así dijo Nelson Vargas, en una reunión con Calderón. Refiriéndose a la complicidad de la policía con los asesinos de su hija.

SI NO PUEDEN, ¡RENUNCIEN!
Esa fue la exigencia de Alejandro Martí.  Al reclamar por el secuestro y muerte de su hijo, en la que está involucrado el círculo íntimo de Genaro García Luna. La cosa quedó allí; por que no pudieron, no quisieron, pero tampoco renunciaron.

USTED NO ES BIENVENIDO
Así le espetó la señora Luz María Dávila, la madre coraje, que de esa forma le reclamó a Calderón haber llamado pandilleros a sus dos hijos, Luis y Marcos, muertos en la masacre de Villas de Salvárcar.

 Mañana jueves 23 de Junio se reúne Javier Sicilia con Calderón. Dice, Javier Sicilia, que va en busca de esperanzas. Pierde su tiempo; de Calderón se puede esperar fraude, engaño, corrupción, simulación, sangre, muerte; muchas cosas se pueden esperar, menos esperanzas.

No, Javier. En todo caso tú eres la esperanza. La esperanza está en tu condición de poeta, de obrero de la palabra. Construye con palabras, Javier, el resumen de los agravios, de los dolores, de los corajes, de la dignidad: dile que no tiene madre; que si no puede, que si no quiere, que renuncie; dile que no es bienvenido a donde habitan los mexicanos de bien.

Con tus manos de artesano de la palabra, levanta del lodo sangriento la frase que sea también resumen de todas las esperanzas.  Dila en nombre de los miles y miles que han vivido y muerto sin nombre y sin esperanza.

A 40 años de una guerra fallida

por Isabel Dorado Auz

           

En un intento de justificar lo injustificable Felipe Calderón ha dicho, en reiteradas ocasiones, que ganará la guerra en contra del narcotráfico. Bien haría el mandatario espurio en leer un artículo del reverendo Jesse Jackson, publicado en el periódico La Jornada, para que entienda la realidad de las cosas.

            Para el excandidato presidencial de los Estados Unidos, "la guerra a las drogas" que lanzó Richard Nixon hace 40 años representa un completo fracaso, a pesar de que se ha gastado alrededor de un billón de dolares. Los saldos han sido 2.3 millones de encarcelados que saturan hoy las prisiones de Estados Unidos, 25 por ciento de los cuales han sido arrestados por crímenes no violentos relacionados con las drogas; pese a todo ello, dice, las drogas son tan asequibles hoy como hace 40 años, y más baratas.

Se pregunta ¿Qué pasaría si tratáramos la adicción a las drogas como la adicción al alcohol, como un problema de salud pública? La mariguana origina la mitad de todos los arrestos relacionados con drogas en Estados Unidos; despenalizarla ahorraría millones que podrían utilizarse para tratar a los adictos en vez de para arrestar muchachos. Las alternativas al encarcelamiento se deben preferir para aquellas personas que no representen amenaza para otros. Por su parte, la Comisión Global de Política sobre Drogas llama a reconocer que la guerra es un fracaso y virar hacia hacer frente a las drogas como un problema de salud pública.

También se pregunta, ¿Por qué no sacar la drogadicción del sistema de justicia penal y atenderla en el sistema de salud pública? Sin duda sería mejor gastar el dinero, no en encerrar a las personas, sino en clínicas que atiendan su enfermedad. Poner fin a la "guerra a las drogas" no significa abandonar el esfuerzo de regularlas, de enseñar a los niños sus peligros, o de tratar a quienes dependen de ellas. Sí significa, en cambio, no desperdiciar millones de vidas más y miles de millones de dólares más en una guerra que no se puede ganar.

En nuestro caso, hubiese significado ahorrarnos esos 40 mil muertos que se siguen viendo como un dato estadístico a pesar del esfuerzo de los familiares de las víctimas por darles rostro y presencia que motive el esclarecimiento de los crímenes y de que llegue la Justicia con Paz y Dignidad. Significaría también, desviar los apoyos económicos aportados por los Estados Unidos a través de la Iniciativa Mérida a causas que permitan combatir la extrema pobreza y, con ello, lograr una mayor igualdad social. No permitir que este tipo de acciones solo lleven el objetivo de legitimar la opresión de unos cuantos sobre la inmensa mayoría y que la guerra solo constituya un pretexto para contener la inconformidad social.

Nos queda claro que el problema de las drogas existe y debe ser combatido con inteligencia. Que los recursos obtenidos, una vez legalizado el uso de las mismas, sirvan para tratar el problema de salud que generan, tal y como ocurre con las drogas legalizadas, el alcohol y el tabaco, que son causantes de un sinfín de enfermedades. Entender que lo prohibido genera más interés y, por ello, el tráfico de drogas se ha constituido en uno de los negocios más lucrativos en la actualidad.

junio 19, 2011

Acerca de las opiniones de Krauze y Domínguez sobre Javier Sicilia




Javier Sicilia, escritor.

Francisco Segovia*

MÉXICO, D.F., 7 de junio.- Las notas de Christopher Domínguez y Enrique Krauze en el periódico Reforma del 15 de mayo repiten una misma acusación. Una acusación, por lo demás, reiterada hasta la saciedad por los que siempre se han preciado de ser "animales políticos"; es decir, hombres prácticos, que actúan con realismo y sensatez. Porque uno y otro opinan, en efecto, que el movimiento encabezado por Javier Sicilia es ingenuo, y que le falta probar su valía más allá de las buenas intenciones y la mera buena fe. Sicilia, dicen, debe "proponer algo serio (…) y no sólo pacifismo histriónico y antigobiernismo ritual" (Domínguez); debe "proponer ideas, (…) no rollos autocomplacientes, confusos, vindicativos, militantes, retóricos, dogmáticos" (Krauze). Pero algo distingue a estos dos críticos, y yo me atrevería a sugerir que es eso que a veces se llama "olfato político". El de Krauze, por ejemplo, es más fino y cauteloso que el de Domínguez, pues él no sólo no cancela la posibilidad de que el movimiento resulte en algo distinto de aquello a lo que nos tiene acostumbrados la política mexicana, sino que le pide expresamente a Sicilia que haga durar su movimiento, aunque aún no tenga claro adónde va. El de Domínguez, en cambio, más encuadrado en el molde tradicional de moros y cristianos, sentencia que Sicilia tendrá que elegir, "tarde o temprano, entre dos polos": el de fundar una asociación de víctimas y el de… no sé… ¿dejarse comer el mandado por la izquierda radical –ésa que sólo tiene derechos porque se los otorgan las barrabasadas legislativas de México–, o por la otra izquierda –ésa que es rencorosa, mala perdedora y populista?...

Lo de Krauze es una especie de apuesta a lo Pascal; ha visto lo que ha ocurrido en Egipto y otras partes del mundo musulmán y pone sus barbas a remojar. Lo de Domínguez, en cambio, es más sentencioso: o la Madre Teresa, o el Diluvio. El primero llamó a apoyar la marcha del 8 de mayo y tiene curiosidad por el movimiento; el segundo, no, ninguna de las dos cosas. El primero saludaría sin duda la fundación de una asociación de víctimas de la violencia; el segundo, en cambio, bostezaría ante esa misma asociación, que a sus ojos no pasaría de ser una más entre las instituciones de asistencia social.

Es notable que estas diferencias se den entre el director de la revista Letras Libres y uno de sus redactores. Y más notable aún parece que en este caso el director parezca menos asertivo que su redactor. Podría verse en ello, quizás, una prueba de que, mal que bien, el movimiento de Sicilia está generando una discusión, y de que la está generando aun dentro de grupos que hasta hace poco parecían gozar de cierta unanimidad de opiniones. Y es que las diferencias que ocurren en el seno de Letras Libres ni son únicas ni originales. También ocurren entre los jóvenes ritualistas –como los llama Domínguez–, entre "los artistas incapaces de desperdiciar una oportunidad de hacer vida mundana al aire libre", entre "los grandes poetas", etcétera. Ya sólo eso me parece un logro nada desdeñable. Porque un movimiento lo primero que debe generar es… movimiento. Y se ve que aquí algo se mueve.

Pero al hablar de eso que se mueve entramos ya de lleno al tema de fondo del debate, en el que coinciden Krauze y Domínguez. Ambos se hacen las mismas preguntas: ¿adónde va el movimiento? y ¿qué alternativas propone? Con todo, uno y otro hacen las preguntas desde actitudes diferentes. He dicho ya que Krauze es prudente, así que expresa sus dudas y expone sus objeciones, pero también se permite aconsejar y hasta pedirle algo al movimiento: que dure. A Krauze, es cierto, le gustaría que el movimiento de Sicilia "se panificara"; es decir, que no desperdiciara la oportunidad de encauzar hoy los principios democráticos que el panismo original pudo haber encarnado y no encarnó. Pero, aun jalando agua para su molino, Krauze espera que sea el movimiento mismo el que responda las preguntas. Domínguez es menos generoso y, sobre todo, menos paciente. Él no espera nada y, como buen desilusionado de la política en general, responde las preguntas con impaciencia y desprecio. ¿Que adónde va el movimiento? A ningún lado. ¿Que qué alternativas propone? Ninguna…

Plantear una pregunta y responderla uno mismo a continuación ¿no es prueba de que la pregunta era retórica? Por supuesto (y acabo de mostrarlo de bulto), pero no me voy a detener ahora en eso. Lo que me interesa es la exigencia de fondo que Krauze y Domínguez le hacen a Sicilia: debe ser práctico y debe proponer alternativas concretas (como si exigiendo estas cosas ellos sí fueran prácticos, alternativos y concretos). Ambos le exigen, en suma, que actúe como ellos creen que debe actuar alguien que encabeza un movimiento; o sea, le piden que actúe como actúan los políticos normalmente. Pero ¿no es justo este tipo de actuación lo que ha estado siempre en el centro de las críticas de Sicilia, mucho antes incluso de que el asesinato de su hijo lo condujera a encabezar, aun a su pesar, un movimiento? Ni Krauze ni Domínguez dejan de reconocer que las ideas de Sicilia no son brotes repentinos en mitad de la tragedia, sino que han venido formándose a lo largo de los años y al amparo de Tolstoi, Gandhi, Lanza del Vasto, Maritain, Ilich y un largo etcétera. ¿Qué ha cambiado, entonces? Es obvio, me dirán: Sicilia encabeza ahora un movimiento. Si eso me dicen, entonces me estarán diciendo que el solo hecho de entrar activamente a la vida política obliga a un hombre a traicionar sus ideales y principios, aunque sólo sea porque los ideales y los principios no suelen ser ni realistas ni prácticos. Entiendo que digan esto, porque eso es justamente lo que hacen nuestros políticos: cambian de partido político según les sople el viento electoral; y porque esa es en efecto la clase de política que se hace tradicionalmente en México, donde los partidos se comportan como simples agencias de colocaciones. Lo que no entiendo del todo es la forma en que remata esta crítica, pues supone que tratar de hacer algo distinto es ingenuidad. Sobre todo –y en esto coinciden casi literalmente Krauze y Domínguez–, si esta diferencia se concibe como una resistencia civil pacífica. Ambos críticos citan aquí a Gandhi y dan por sentado que en México un movimiento inspirado en él sería inútil, ingenuo, histriónico. ¿Por qué? No lo sé. No lo dicen. Supongo que porque aquí lidiamos con delincuentes crueles y sin conciencia, mientras que los indios lidiaban con el civilizadísimo ejército británico. No lo sé. En cualquier caso, la descalificación del pacifismo sirve para apoyar el uso de la fuerza militar en el combate al crimen organizado.

Domínguez parece apoyarse en Weber para declarar que la violencia es prerrogativa exclusiva del Estado y añadir que, en ese sentido, el presidente Calderón tiene derecho a ella –aunque violente la Constitución sacando al Ejército a la calle. Pero ni siquiera él deja de escuchar el reclamo de fondo –ése que no le niega al Estado tal derecho, sino que le exige que lo use para el bien de la ciudadanía, no para su mal; ése que le señala al gobierno actual su fracaso en el empleo de la violencia, porque la violencia se ha vuelto en contra de aquellos a quienes dice proteger de la violencia, y se ha vuelto en contra de ellos impunemente. No, Domínguez no apoya este reclamo, pero al menos lo escucha. Y no podría ser de otro modo, cuando hasta el presidente y el secretario de la Defensa han reconocido que militares y policías cometen "errores", y que en esta guerra, como en todas, hay "daños colaterales". Llamar así a las cosas es cínico y es ofensivo, pero también evasivo. Esos sí que son términos vagos y abstractos, encaminados a rebajar la gravedad del problema; vagos y mal intencionados, encubridores, mentirosos…

Es la impunidad de esos actos y de esas palabras lo primero que reclama Sicilia. Por eso lo que dice su movimiento no es abstracto ni es ingenuo. No podría serlo. Porque no es, en principio, sino una reacción ante lo evidente. Y lo que dice es simple: ¡Estamos hasta la madre! Hay 40 mil muertos en lo que va de este sexenio, mientras los políticos y los funcionarios sólo piensan en lo suyo (las elecciones, las prebendas, los cochupos). El país se está cayendo a pedazos, carcomido por la corrupción, el crimen y la violencia (de los narcos y de las fuerzas del Estado). ¡Paren esta locura! ¡Ya basta!...

La demanda es simple y está bien justificada. Pero el gobierno no parece sopesar su gravedad como debiera. Porque no parece entender que los mexicanos –como todos– aguantamos mejor la pobreza y la miseria que la injusticia. O, dicho de otro modo, que aguantamos mejor la injusticia económica y la injusticia social que la injusticia jurídica, la injusticia en su sentido lato. Cuando ve a la gente protestar por la injusticia, el gobierno debería escuchar con atención y actuar con diligencia. Se trata de algo simple, pero muy grave y urgente. Es indicio del desmoronamiento del estado de derecho.

Si Krauze se siente llamado a advertirnos del peligro que corre el movimiento de Sicilia al cometer el pecado de ingenuidad es quizá porque está pensando ya en lo que sigue, y a sus ojos lo que sigue es "la politización" del movimiento. Quiero decir, la politización en el peor sentido del término. El movimiento es ya político, desde luego, pero lo es sobre todo respecto de lo político, no de la política (y de ahí que su actitud sea "ciudadana"). Cuando Krauze le pide a Sicilia que haga durar su movimiento, lo que le pide es que lo conserve libre de la mala politización, libre de la política, no de lo político. La advertencia es valiosa, por más que uno no crea que Sicilia se vaya a dejar arrastrar a la cloaca de la política "normal". Domínguez abriga menos esperanzas –o, mejor dicho, no abriga ninguna. Él condena desde ya al movimiento a no tener más futuro que el de la fundación de una A.C. o la sumersión en el charco pantanoso de la izquierda. Para él, Sicilia no tiene ninguna esperanza de sobrevivir en el violento mar de tiburones que es este país. Por eso es extraño que, con todo, también él tenga algo que pedirle: que busque –dice– "un meridiano político-moral que concilie a quienes consideramos que el presidente Calderón posee toda la legitimidad para combatir al narcotráfico con quienes consideran errada la estrategia". Sí, algo se mueve...

Yo supongo que Javier Sicilia leerá los artículos de Krauze y Domínguez con la generosidad de siempre y que sabrá ver en sus palabras, no algo que le piden, sino algo que le dan. Esto es, creo, parte de la lección moral que Sicilia está dándole al país. l

*Francisco Segovia es investigador de El Colegio de México, autor de varios libros de poesía y miembro del equipo de análisis y redacción que dio forma al Diccionario del español de México (Colmex, 2010).

junio 15, 2011

Resumen del caso Hank Rhon



Resumen del caso Hank Rhon-Fisgón

La caravana del consuelo

por Isabel Dorado Auz

De acuerdo a la Real Academia Española, la palabra consuelo significa descanso y alivio de la pena, molestia o fatiga que aflige y oprime el ánimo. Eso es precisamente lo que se buscaba como objetivo principal desde que inició la Caravana convocada por Javier Sicilia. Observé como cientos de Juarenses se identificaban unos con otros y recibían un gran apoyo moral de otros tantos que partieron desde diversos puntos de la geografía nacional para estrechar manos y aportar abrazos que lograran resarcir, en parte, el enorme dolor que aflige a una comunidad en pie de lucha.

Desde temprano, el viernes por la mañana empezaron a llegar los contingentes. Desde Sonora, más de 40 personas hicimos nuestro arribo a las instalaciones de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez en un autobus proporcionado por el Sindicato de Trabajadores Académicos de la Universidad de Sonora. Poco después de las 10:00 a.m. daba inicio la inauguración del evento bajo la vigilancia de un helicóptero de la Agencia Federal de Investigación. En las mesas de trabajo fueron muchos los temas que se discutieron y, por ello, los resolutivos de las mismas abarcaron prácticamente todos los temas de la agenda política nacional, pero, de igual manera, no pudo concretarse un plan de acción concreto para empezar a darle solución inmediata a la grave problemática social.

Por la tarde noche se cerró la jornada con una concentración en el monumento a Benito Juárez. Lugar donde una joven mujer, mostraba un cartel donde se leía "A mi también me mataron a un hermano", otra más exigía que se hiciera justicia en torno al asesinato de su esposo que la dejó a ella viuda y a cuatro hijos huérfanos, muchas personas más daban testimonios desgarradores que me hicidron recordar la tragedia de la guardería ABC.  Julián Lebarón reconoció que desafortunadamente su despertar proviene de una tragedia familiar (en junio del 2009 asesinaron a su hermano). Pidió a la concurrencia utilizar el amor como solución. El amor no es débil, dijo, es de color rojo, es la fuerza presente en los dolores de parto y lo que sigue en México es dar a luz a una nueva generación, que resuelva el problema de la violencia, porque México si tiene solución. Debemos entender que el país es nuestro y debemos tomarlo entre nuestras manos poco a poco de forma decidida y no violenta. Javier Sicilia le preguntaba a Felipe Calderón si su guerra había valido la pena, le reclamaba el hecho de haber recurrido a ella sin llevar a cabo, previamente, una reforma del Estado y que solo se haya ocasionado muerte y desolación. Aprovechó el poeta, además, para mandar un mensaje de paz, pero al mismo tiempo mantener la lucha en contra de la impunidad y la corrupción existente, dejó claro que si es necesaria la desobediencia civil se tiene que recurrir a ella y terminó recordando un pasaje de la lucha de Gandhi. Por su parte los Juarenses exigían a través de una consigna que se repetía constantemente "Juárez no es cuartel fuera ejército de él".

Observé la participación de muchos jóvenes. Desde Sonora, por ejemplo, se hicieron presentes alrededor de una veintena de ellos, quienes acudieron al llamado del poeta y participaron activamente en las mesas de trabajo, especialmente la referente a la participación juvenil en el Pacto Ciudadano que surgiría de las discusiones y se aprobaría en la plenaria. Jóvenes que aportaron ideas frescas y que constituyen la esperanza de esa nueva generación a la que hizo alusión Lebarón. Jóvenes que aportaron consuelo a ese gran dolor que hizo posible un encuentro que debe ser el inicio de una gran lucha pacífica para transformar de fondo la forma de hacer política en nuestro amado país.

junio 14, 2011

PLATICANDO CON DIOS... BORRACHO NO VALE

Martín Vélez

Dicen que Felipe Calderón es un borrachín de marca. El tecleador de estas teclas se ha resistido a creer esas versiones, a pesar de que algunas de ellas están suficientemente documentadas. De hecho, Carlos Castillo Peraza alguna vez escribió una carta recriminándole a Felipe haberlo dejado plantado en una cita; para después enterarse, Carlos, de que Felipe no asistió a la cita por andar "bien servido".

Pero una cosa es echarse unas chelas, o unos tequilas, o lo que sea, por donde sea, y otra muy diferente es empezar a platicar con Dios. En esas anda ahora don Felipe Calderón. A juzgar por unas declaraciones, poco conocidas, que fueron dichas por el ocupante de Los Pinos en su reciente visita a la Universidad de Stanford.

La visita a Stanford es recordada por dos cosas: por la tronante embestida de Felipe contra la "era priísta"; y por el avioncito que surcó los cielos, mientras Calderón hablaba y hablaba, arrastrando una manta con la leyenda "40,000 dead. How many more? No + sangre".

Pero el ojo de fino periodismo de Antonio Navalón (El Universal, 14 Jun. 11) recupera una parte del discurso de Calderón que es por demás preocupante. Por que ahora resulta que Calderón se ha elevado a una altura tal que ya hasta platica con Dios, y recibe mandatos directos de Él. Si no me creen, dejemos que Felipe lo diga con sus propias palabras: "Cualquier cosa que se haga ya fue hecha, cualquier crimen que se cometa ya fue cometido, venimos de una dictadura del pensamiento y de las actitudes y lo que no hicimos en el año 2000 en el tránsito pacífico de la alternancia del poder, de Zedillo a Fox, me ha tocado hacerlo a mí siguiendo el mandato divino que recibí de acabar con la era priísta" Hasta ahí lo dicho por Calderón, citado por Navalón.

Debe ser preocupante el estado de salud mental del Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas. El hombre que tiene el poder para apretar miles de gatillos al mismo tiempo anda platicando con el Creador. Y desde el extranjero, nos comunica los mandatos que Dios le ha dado. Por lo menos ya nos compartió uno: acabar con la era priísta.  

O sea que Dios no debe estar muy enojado con los priístas. Digo, si mandó a Felipe a acabar con ellos, quiere decir que no los odia tanto. Por que parece que Felipe, en vez de acabarlos, los está engordando. A menos que se los quiera acabar por la infalible vía, aunque tardada, de la obesidad mórbida. Por que, desde que Felipe desgobierna y desgobierna, el PRI engorda y engorda.

Si Vicente Fox logró la hazaña de demostrar que es posible gobernar peor que el PRI; Felipe Calderón ha logrado la proeza de demostrar que es posible gobernar peor que Fox. Por eso,  millones de mexicanos, con una pequeña aunque cara ayuda televisiva, están volteando a ver en el PRI la salida a  la grave crisis en la que estamos; en la que nos han metido la hazaña foxista y la proeza calderonista.

Cada vez queda más claro: Dios no está enojado con el PRI. Está enojado con el resto de los mexicanos. Estamos pagando los sacrificios humanos de los aztecas, los crímenes de la Santa Inquisición. No sé. Pero algo muy grave hemos de haber hecho; para que nos haya castigado con 12 años de PAN, y nos amenace con regresarnos a las garras del PRI.

Ojalá que Felipe Calderón platique de nuevo con Dios y nos aclare el misterio. Pero escóndanle la botella, por que borracho no vale.

junio 06, 2011

El embajador


En vísperas de la marcha por la paz, de Javier Sicilia, a Ciudad Juárez (4-10 de junio), y de la inminente ratificación del próximo embajador de Barack Obama en México, y en medio del debate sobre la despenalización de las drogas, el gobierno de la ultraderecha mexicana no hace más que insistir en su discurso violento.

1. La rápida designación hecha por el gobierno de Barack H. Obama de Earl Anthony Wayne, como nuevo embajador estadunidense en México, para remplazar al defenestrado Carlos Pascual, inviable para el cargo tras la difusión hecha en marzo por La Jornada de diversos cables filtrados por Wikileaks –en los que funcionarios de la embajada criticaban acremente a la administración calderonista y a las fuerzas armadas mexicanas por su papel en la supuesta "guerra contra el narco"–, es una evidencia tanto de la prioridad que reviste para el Departamento de Estado la estrategia que ha seguido en nuestro país para subordinar al gobierno panista como de la urgencia que tiene en profundizarla, visto el perfil del designado: un experto en energía y en contrainsurgencia.

2. La cuestión fundamental para México no es, sin embargo, el perfil del nuevo embajador, que ha sido subsecretario de Estado adjunto en asuntos económicos y de energía con Bush (2003-2006), y quien durante su gestión diplomática en Buenos Aires (2006-2009) dio muestras del nuevo estilo de los neoliberales washingtonianos, que perdiendo todas las formas no se arredran ante los conflictos que pueden generar, como le aconteció con la administración Kirchner, lo que lo condujo a Kabul como número dos de la embajada en Afganistán para hacerse cargo de la guerra, y ha llevado a varios analistas de su país a sugerir cuál será el papel que desempeñará en un momento en que es evidente el fracaso de Calderón en la "guerra contra el narco" y en el que, según ellos, se exacerban los problemas en la frontera sur de México.

3. El problema para México no es él, desde luego, designado en función de los intereses expansionistas de Washington, sino las políticas del gobierno panista, que ha subordinado las instancias de seguridad mexicana a Estados Unidos, en un proceso cada vez más complicado de revertir y, sobre todo, la composición de la nueva clase política de los tres principales partidos, integrada en su mayoría por neoliberales ambiciosos, carentes de una comprensión de las necesidades populares y de una idea de la nación y de las instituciones de la República, y dispuestos a entregar el país a Washington, lo que ha agravado el gravísimo deterioro institucional.

4. Las consecuencias del actual desastre en materia de seguridad nacional están a la vista, como el hechio de que están agravadas por el papel de la burocracia priísta, que se asume sin serlo en fuerza de oposición. Ante el entreguismo del gobierno del PAN no hay un Congreso (donde el PRI es la principal fuerza partidista) que defienda la integridad soberana de México y haga valer los principios de la diplomacia mexicana, las fuerzas armadas mexicanas obsecuentes a Calderón aceptan vergonzosamente subordinarse a las agencias de seguridad estadunidenses y en los gobiernos estatales prevalecen mandatarios locales ansiosos de subordinarse al exterior.

5. La tradicional estrategia estadunidense, secundada dócilmente por Calderón, de generar hechos de violencia para aducir la necesidad de la intervención armada de sus agencias, que en los últimos meses busca de manera muy burda extenderse a la frontera sur de México y a los países centroamericanos –tal y como lo esboza la Iniciativa Mérida–, ha encontrado de esta manera un apoyo vergonzoso en las autoridades estatales mexicanas. El gobernador priísta de Tabasco, Andrés Granier Melo, lleva por ejemplo una campaña permanente pidiendo el envío de más tropas al sureste para garantizar la seguridad, y lo mismo el 23 de febrero que el 10 de mayo hizo llamados internacionales para ello.

6. Las tres tesis falaces que Washington, con la complicidad del gobierno de Calderón, está buscando imponer en México y en el mundo para sustentar de manera impune su intervencionismo en nuestro país (y en otras partes), y que según los analistas estadunidenses habrán de ser fundamento de la gestión del embajador Wayne, están siendo secundadas por la administración panista de manera irresponsable, a pesar de que son inadmisibles en términos del derecho internacional, y ello es extremadamente preocupante: a) la primera es que todo lo que acontece en territorio mexicano tiene que ver con la seguridad doméstica de Estados Unidos; b) la segunda es que los cárteles mexicanos constituyen poderosas organizaciones criminales internacionales que constituyen una amenaza global, y c) la tercera es que la lucha contra el narcotráfico debe ser global (como concibe Washington la lucha contra lo que llama terrorismo), lo que le abriría a Estados Unidos, en su papel de policía del mundo, la vía para intervenir en cualquier parte con ese pretexto.

7. La tesis paladina de que las relaciones entre Estados Unidos y México son estratégicas para Washington porque cuanto ocurre en territorio mexicano tiene que ver con la seguridad doméstica de Estados Unidos fue desarrollada por Roberta Jacobson, subsecretaria de Estado adjunta, el 17 de marzo en un encuentro en la capital mexicana, y a pesar de que estaban presentes el embajador Arturo Sarukhán, y otros diplomáticos panistas, nadie le refutó tamaña barbaridad.

8. La falacia de que los cárteles mexicanos constituyen la mayor amenaza para la seguridad de Estados Unidos y del mundo, misma que se fue desarrollando de manera perversa tras el asesinato el 2 de mayo de Osama Bin Laden, cuando se sostuvo, lo mismo en el Pentágono que en la prensa inglesa, que el principal enemigo de Washington (y de la humanidad) era tras la muerte de Osama nada menos que El Chapo Guzmán, ha sido desarrollada a pesar de su estupidez por los medios mexicanos, incapaces de preguntarse cuáles son los principales cárteles estadunidenses y europeos.

9. La pretensión, en fin, de Barack Obama, de que Washington tiene la prerrogativa de luchar contra lo que llama el narcotráfico y el crimen organizado en cualquier país, porque va de por medio la seguridad nacional estadunidense, lo que hace de esta lucha una lucha global, lo sitúa en las líneas intervencionistas de James Monroe (1809-1817), Theodore Roosevelt (1901-1909), Ronald Reagan (1981-1989) y George W. Bush (2001-2009), pero sigue siendo una tentativa fallida para justificar la violación que en los hechos lleva a cabo Estados Unidos de la legalidad internacional.

10. El atentado del gobierno de Calderón contra la integridad de la República no tiene parangón, y por eso para frenar su entreguismo desquiciado se le sigue exigiendo cada vez más con mayor fuerza: ¡Ya basta!

Un Cordero “clasemediero”




Ernesto Cordero, secretario ESPURIO de Hacienda y Credito Publico

John M. Ackerman

De acuerdo con Felipe Calderón y su candidato "destapado", México es ya un país de "clases medias" que avanza con paso firme hacia la modernidad y el progreso. Ni Calderón ni Ernesto Cordero se cansan de repetir este falso mantra, sobre todo cuando viajan al extranjero o se reúnen con empresarios. La semana pasada, el secretario de Hacienda declaró ante la Coparmex que nuestro país "viene a consolidar clases medias como hace tiempo no lo lograba". Esta nueva ocurrencia no desentona con aquella otra torpe declaración de que las familias mexicanas con tan sólo 6 mil pesos pueden vivir cómodamente porque "tienen crédito para una vivienda, tienen crédito para un coche, se dan tiempo de mandar a sus hijos a una escuela privada y están pagando las colegiaturas".

Pero ni Calderón ni Cordero han inventado el agua tibia, sino que no hacen más que repetir las teorías de escritores como Héctor Aguilar Camín, Jorge Castañeda, Luis Rubio y Luis de la Calle, quienes desde hace mucho tiempo se han dedicado a promover precisamente la idea de un México "clasemediero". Los últimos dos incluso han publicado recientemente un libro que lleva esta expresión en su título.

El argumento principal de estos intelectuales es que la creciente urbanización y la mayor disponibilidad de bienes y servicios básicos como agua potable, drenaje, electrodomésticos, televisión, casa-habitación propia, escuelas privadas, celular e internet están construyendo una sociedad con valores "clasemedieros" más conservadores que aquellos ideales "revolucionarios" que predominaban en el pasado. Antes, los pobres y los excluidos luchaban para transformar la estructura social de raíz. Pero hoy, de acuerdo con estos discutibles postulados, los mexicanos solamente buscarían tener mayor "movilidad social" para poder acceder a los "placeres" de la clase media. El corolario es que una vez que los ciudadanos logran tener acceso a estos bienes y servicios, inmediatamente asumen una actitud profundamente conservadora y defienden su pequeña propiedad en contra de cualquier posibilidad de cambio político o económico.

Rubio y De la Calle celebran este supuesto cambio cultural: "No hay duda alguna de que una parte muy significativa de la población se siente de clase media y quiere proteger esa condición que tanto esfuerzo le costó alcanzar". Estas personas tienen "un sentido de propiedad, pertenencia y derecho a preservarlo" y, por lo tanto, "su actitud política se inclina a ser conservadora y rechaza cualquier alternativa que pudiera alterar su seguridad".

Los escritores señalan como una tendencia particularmente positiva el hecho de que cada vez más mexicanos ponen nombres extranjeros a sus hijos y los envían a escuelas particulares con nombres foráneos, ya que esto evidencia su "aspiración de movilidad social". Los autores también celebran el "fenómeno Walmart" que supuestamente ha "reducido el precio de alimentos, ropa y calzado", así como la tendencia para que "la sociedad mexicana se asemeje a las sociedades desarrolladas".

En un evidente eco del proyecto totalitario de la Iniciativa México, dicen que necesitamos un radical cambio de actitud: "Los mexicanos con frecuencia ven el futuro con temor y se imaginan catástrofes y dificultades". Sin embargo, según los autores, "la realidad objetiva contradice este conjunto de percepciones: hoy resulta innegable la posibilidad del progreso individual y familiar, sea a través de la acumulación de capital humano, la participación en actividades empresariales –incluidas las informales– y la emigración".

Es aquí donde queda claro que lo que realmente importa a los autores no es la posibilidad de un verdadero desarrollo económico o acabar con la pobreza en la que subsisten por lo menos 50 millones de mexicanos, sino simplemente la multiplicación de válvulas de escape, como la emigración o el trabajo informal, que resuelven algunas necesidades básicas en el corto plazo y así pacifican a la población ante una situación de crisis generalizada.

El proyecto "clasemediero" que Calderón y Cordero asumen como propio no es una propuesta de desarrollo social, sino una iniciativa eminentemente política e ideológica. Su objetivo principal es moldear el país a imagen y semejanza de naciones supuestamente "desarrolladas", como Estados Unidos, y rechazar el legado de importantes luchas sociales, iniciativas colectivas y pensamiento crítico que distingue a la historia mexicana.

La naturaleza ideológica de este planteamiento queda desnuda cuando Rubio y De la Calle aclaran que ser "clasemediero" de ninguna manera implica disponer de una cómoda situación económica: "Los integrantes de la clase media pueden tener ingresos desde unos cuantos salarios mínimos por hogar hasta varias decenas del mismo indicador". Es decir, los pobres también pueden ser de la "clase media", siempre y cuando "actúen" como integrantes de ésta y entren al juego del consumismo individualista y privatizador impuesto por el vecino del norte. Desde este punto de vista, lo que realmente importa para el futuro del país no sería atender los graves desequilibrios sociales y económicos, sino simplemente educar a los mexicanos para que tengan una "visión positiva del mundo" y una "disposición a disfrutar la vida más allá de lo cotidiano", de modo que ya no se quejen tanto de la inefectividad gubernamental o los privilegios de los poderes fácticos.

Al final de su discurso ante la Coparmex, Cordero tuvo un momento de lucidez: "Si logramos hacer lo que tenemos que hacer en los próximos años, México, sin ninguna duda, va a ser muy diferente dentro de cinco años de lo que es ahora".

Lo que se le olvidó comentar al aspirante presidencial es que hoy mismo también estaríamos en una situación "muy diferente" si los gobiernos del PAN hubieran hecho "lo que tenían que haber hecho" durante los últimos 10 años de "transición" democrática.

Ya es hora de dejar de culpar al pueblo mexicano por la desgracia en que se encuentra el país. El desastre nacional en materia de seguridad, corrupción, impunidad, salud y educación no se debe a las actitudes supuestamente "atrasadas" de los ciudadanos, sino al elitismo, malinchismo y complicidad de nuestros gobernantes y sus intelectuales orgánicos. l

www.johnackerman.blogspot.com

Twitter: @JohnMAckerman

VIDEO: Asamblea de MORENA en el Zócalo de la Cd. de México



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Cobertura: AMLOTV SOBERANIA POPULAR








junio 04, 2011

PROPUESTA CONTRA LA IMPUNIDAD

LE SUPLICO ATENTAMENTE. LEER LA PROPUESTA QUE PRESENTO  A LA CONSIDERACIÓN DE LOS PARTICIPANTES DEL ACTO "1 MINUTO X NO + SANGRE". LA CUAL ESTA BASADA EN EXPERIENCIAS  Y  ESTRATEGIAS EFECTUADAS POR EL SUSCRITO, CONTRA LA IMPUNIDAD.

 

SR. MIGUEL ÁNGEL GRANADOS CHAPA

Participante  en el  Acto

"1 minuto X  No + Sangre"

P r e s e n t e

miguelangel@granadoschapa.com

 

 

Por este medio expreso mi solidaridad a los organizadores y participantes a ese acto a favor de la desmilitarización y la paz, así como por el fin de la impunidad y la corrupción en México.

 

Sin embargo, considero que la impunidad y cinismo de la clase política gubernamental, legislativa y judicial, es el verdadero  origen de la mayor parte de los grandes problemas de este país, llámense inseguridad, narcotráfico, desempleo, secuestro, migración, pobreza, marginación, desigualdad social, etcétera, etcétera.

 

Es así que salvo una errónea apreciación del suscrito. Para controlar la mayor parte de los males de este país, la ciudadanía debe tener los elementos jurídicos para obligar al Poder Público a trabajar verdaderamente en beneficio de la sociedad. Toda vez que ese poder es el que permite por complicidad, omisión  o incapacidad,  la grave situación que esta padeciendo el país.

 

Desde mi óptica personal, considero que para conocer y entender el verdadero origen de la violencia y la inseguridad que esta padeciendo gran parte de la sociedad. No se debe pasar por alto la impunidad y corrupción de la clase política de este país. La cual aún cuando pertenezca a diferentes partidos políticos. Ante el peligro de perder sus grandes privilegios funciona como una siniestra hermandad para protegerse mutuamente. Asimismo, esos privilegios los ha asegurado a través de instituciones, mecanismos y un marco jurídico a modo. Por lo tanto a esa clase política no le importa el tamaño de los ilícitos que cometa, toda vez que tiene garantizada la impunidad de sus malas acciones.  

 

En tal sentido, además de un gran movimiento social organizado y permanente, se requiere que esa sociedad logre que exista un marco Constitucional, instituciones y mecanismos, para que el ciudadano común este en igualdad de circunstancias frente al poder público. Y que ese ciudadano pueda tener todas las garantías y facilidades para denunciar y lograr sea conocida y sancionada la impunidad de la clase gubernamental, legislativa y judicial. 

 

En tanto no se logren esos mecanismos, instituciones y marco Constitucional. La sociedad organizada puede constituir comités contra la impunidad gubernamental, los cuales levantarían el ánimo nacional y pueden ser el inicio del gran cambio que requiere México.

 

Respecto de la propuesta de crear los comités contra la impunidad gubernamental.   Las Revistas  CONTRALÍNEA y FORUM   en fechas 09 y 16 de enero de 2011, respectivamente, tuvieron la amabilidad de dar a conocer a sus críticos Lectores, los antecedentes y  fundamentos que sustentan la señalada propuesta.     Copia de las publicaciones mencionadas, se agregan como archivos adjuntos uno y dos

 

También la propuesta de crear los comités contra la impunidad gubernamental, el suscrito se la expuso en fecha 02 de febrero del presente, al ING. CUAUHTÉMOC CÁRDENAS SOLORZANO. Quien amablemente en fecha 03 de febrero de 2011, respondió que coincidía con el planteamiento de luchar a fondo contra la impunidad  y la corrupción, lo que consideró "…sólo puede hacerse a partir de un esfuerzo amplio, colectivo, plural tanto en lo político como en lo social."    Copia de la respuesta del Ing. Cárdenas, se agrega como archivo adjunto tres.

 

La próxima reunión del lunes 06 de junio de 2011, con la presencia de tanta gente distinguida es su lucha contra la impunidad. Puede ser la ocasión para que uno de sus importantes acuerdos, sea la creación de uno o varios comités contra la impunidad gubernamental.  Los cuales serían el detonante de cientos o miles de comités a lo largo y ancho del país.

 

Por último le manifiesto que la propuesta que presento a su consideración, es producto de múltiples experiencias personales en donde he padecido y combatido con triunfos constantes, incontables e increíbles actos de impunidad. Razón por lo cual opino respecto del particular. (Puedo probar mi dicho si es necesario)

 

Por lo expuesto, a usted SR. MIGUEL ÁNGEL GRANADOS CHAPA, participante en el acto:"1 MINUTO X NO + SANGRE". Atentamente, pido se sirva:

 

PRIMERO:  Tener por recibida la señalada propuesta, Así como también por recibida la atenta solicitud del suscrito, en cuanto a que la comparta con los demás participantes del evento.

 

SEGUNDO:   Tener por recibido el ofrecimiento del que esto escribe, de fundamentar más ampliamente (En caso de ser necesario) lo concerniente a la propuesta de los comités contra la impunidad gubernamental.

 

Sin otro particular, agradezco su atención respecto del presente documento, y aprovecho la ocasión para felicitarlo por el objetivo y didáctico Periodismo que usted realiza en los medios de comunicación.

 

A t e n t a m e n t e

 

 

Manuel Guerrero Ramos

México, D.F., a 04 de junio de 2011

mscysi@gmail.com

junio 01, 2011

¡Ni una muerta mas!

por Isabel Dorado Auz

Esa ha sido la expresión que ha utilizado el pueblo de Ciudad Juárez para denunciar los múltiples feminicidios que ocurren de manera cotidiana en esa importante puerta de entrada al "sueño americano". Han levantado fuerte la voz y han mostrado un inagotable nivel de organización que ha propiciado mantener la presión ciudadana para exigir justicia y convocar, en esta ocasión, a una caravana nacional en apoyo a esa importante lucha que ha trascendido nuestras fronteras, pero que no encuentra las respuestas correctas para acabar de raíz con este cáncer social.

El gobierno federal tomó como pretexto esta demanda ciudadana e implementó su estrategia de darle todo el poder al ejército mexicano con la ilusión ingenua de salir victorioso en su famosa guerra en contra del narcotráfico. Los resultados, todos los conocemos. El ejército fue acusado de violar permanentemente las garantías individuales, los daños colaterales cobraban cada vez más víctimas inocentes y los defensores de los derechos humanos se convirtieron en el peligro principal que tenían que enfrentar tanto el gobierno como el crimen organizado. Dos mujeres muy valiosas fueron asesinadas y un gran número de jóvenes pagaron con su vida el derecho a un momento de esparcimiento.

Después de tanta denuncia, después de tanto sufrimiento, surge desde la sociedad civil un acto de solidaridad, más como una necesidad de la sociedad misma para apuntalar una alternativa que permita restablecer el tejido social. Poco a poco se muestra una mayor intervención colectiva desde el poder ciudadano. Desde las luchas ambientalistas hasta la defensa de PEMEX, sin olvidar la lucha de los trabajadores mineros, los electricistas y últimamente los de Mexicana de Aviación. Desde el grito desgarrador clamando justicia de los Padres de la Guardería ABC, quienes a casi dos años de la tragedia siguen mostrando su indignación y enjuiciando desde abajo a quienes dicen representarnos en las funciones de gobierno, hasta esa lucha incansable que está llevando el valiente pueblo de Ciudad Juárez.

Todas esas luchas deben hacer convergencia en la Frontera Norte que nos está dando muestras de dignidad. Una sociedad fronteriza que exige justicia y que ha mostrado que el mejor camino es la lucha pacífica. Es momento de ser solidarios con quienes ya despertaron de su letargo y que nos están ayudando a abrir más los ojos para observar que nuestro mundo incluye muchos lugares que parecieran distantes pero que en realidad están más cerca que nunca. Lugares que son reflejo y espejo de nuestras acciones. Lugares que nos indican que es momento de levantar la voz, pero que esa voz debe ir acompañada por miles de garantas, para hacer entender a quienes "gobiernan" que la fuerza de la razón siempre se impondrá a la razón de la fuerza.

Por eso, aunque "estemos hasta la madre" de tanta ineptitud del gobierno es importante dejar en claro que las muestras de solidaridad siempre ayudan a levantar el ánimo. Demostremos que somos capaces de organizarnos a mayor escala y que esta Caravana en la segunda semana de Junio no solo sirva para levantar la voz y gritar muy fuerte ¡Ni una muerta más!, sino que al mismo tiempo nos demos cuenta que la solución la tenemos nosotros y juntos podemos darle viabilidad a este país que se está deshaciendo en las manos de los poderes fácticos.