julio 16, 2009

Busca EU consolidar golpe en Honduras: Fidel Castro

También que "deje de prestar apoyo militar a los golpistas y retire de Honduras su Fuerza de Tarea", dijo.

Notimex
Publicado: 16/07/2009 23:17

La Habana. El líder cubano Fidel Castro acusó hoy al estadunidense Departamento de Estado de intentar contribuir a la consolidación del golpe cívico-militar en Honduras mediante la mediación de Costa Rica.

En su columna Reflexiones del sitio digital oficial cubadebate.cu, Castro opinó este jueves que lo único correcto en este momento es "demandar del gobierno de Estados Unidos que cese su intervención", en el país centroamericano.

También que "deje de prestar apoyo militar a los golpistas y retire de Honduras su Fuerza de Tarea".

"El golpe -en Honduras, que sacó al presidente Manuel Zelaya del gobierno- fue concebido y organizado por personajes inescrupulosos de la extrema derecha, que eran funcionarios de confianza de George W. Bush y habían sido promovidos por él", dijo Castro.

El ex gobernante de 82 años descartó que el embajador de Estados Unidos en Tegucigalpa, Hugo Llorens, ignorara o desalentara el golpe. "Lo conocía, al igual que los asesores militares norteamericanos, que no cesaron un minuto de entrenar a las tropas hondureñas", anotó.

"Cada día se conocen nuevos detalles de la implicación de Estados Unidos en esa acción, que tendrá también seria repercusión en toda América Latina", expresó el veterano líder cubano, ausente de la escena pública desde hace tres años por un percance de salud.

Castro descalificó la mediación del presidente costarricense y Premio Nobel de la Paz, Oscar Arias, porque "la reunión de Costa Rica no conducía ni podía conducir a la paz".

En su criterio, "con la reunión de Costa Rica se cuestiona la autoridad de la ONU, la OEA y demás instituciones que comprometieron su apoyo al pueblo de Honduras".


Para el ex mandatario, cuando el presidente de facto Roberto Micheletti anunció estar dispuesto a renunciar a su cargo si Zelaya renunciaba, "sabía ya que el Departamento de Estado y los militares golpistas habían acordado sustituirlo y enviarlo de nuevo al Congreso como parte de la maniobra".

Según Castro, "cada día de retraso tiene un costo para el Presidente Constitucional y tiende a diluir el extraordinario apoyo internacional que ha recibido".

"La maniobra yanki no incrementa las posibilidades de paz, sino todo lo contrario, las disminuye, y el peligro de violencia crece, ya que los pueblos de nuestra América no se resignarán jamás al destino que les tienen programado", aseveró.

En una anterior reflexión el pasado 10 de julio, Castro estimó que si el depuesto presidente de Honduras Zelaya no es reinstalado en su cargo "una ola de golpes de Estado amenaza con barrer a muchos gobiernos de América Latina".

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