■ Se quiere disfrazar como apoyo a las Pymes, alerta el tabasqueño
Enrique Méndez, Alma Muñoz y Roberto Garduño
Andrés Manuel López Obrador presentó ayer al Frente Amplio Progresista (FAP) su programa para la defensa de la economía popular, que plantea reasignar 230 mil millones de pesos del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2009 y el uso de 139 mil millones de pesos de subejercicios en este año.
Con esto se generaría “una bolsa de 369 mil millones de pesos, para canalizarlos a programas y acciones urgentes que promuevan el desarrollo, la actividad económica, el empleo y el bienestar de la gente”, sostuvo en reunión con legisladores de PRD, PT y Convergencia en el salón de protocolo de la Cámara de Diputados.
Allí alertó que el gobierno de Felipe Calderón pretende llevar a cabo un “rescate encubierto de las grandes empresas, con un programa a cargo de Mario Laborín, cuñado de Eduardo Bours (gobernador de Sonora), y que está en Nacional Financiera”.
Este rescate, afirmó, “va dirigido a los empresarios que apoyaron con dinero la campaña de Calderón, que llevaron a cabo la guerra sucia (en mi contra) y participaron en el fraude electoral” de 2006, y se quiere disfrazar como “un apoyo a las pequeñas y medianas empresas (Pymes)”.
Ya se habla, añadió el ex candidato presidencial, del rescate de Coppel; Aeroméxico, propiedad de José Luis Barraza y Roberto Hernández, y de Mexicana de Aviación, de Gastón Azcárraga; pero “vamos a darle seguimiento a todos estos posibles rescates a grandes empresarios”, advirtió.
También exhortó a los diputados del FAP a modificar el esquema del manejo de los fondos de retiro de los trabajadores en las Afore, de los cuales actualmente hasta 20 por ciento se invierte en valores en el extranjero. ¿Por qué tomaron esta decisión? “Para favorecer a un grupo de especuladores financieros”, sin importarles que “ponen en riesgo el ahorro de alrededor de 38 millones de trabajadores. Es urgente evitar que los trabajadores y las clases medias sigan perdiendo sus fondos de pensiones”.
López Obrador señaló que es el momento de cambiar, en definitiva, la política económica que sólo atiende a los “privilegiados” de siempre. “Urge utilizar todos los instrumentos del Estado, en particular el presupuesto público, para apoyar y proteger al pueblo en estos tiempos difíciles”, manifestó.
Si se aprueba este propuesta anticrisis, insistió, “sería posible enfrentar el sentimiento de frustración y la incertidumbre que prevalece, creando un ambiente de seguridad, de aliento y de esperanza al pueblo de México”.
Por ejemplo, dijo, en el Distrito Federal y en todo el país hay un clamor general porque los recibos por el consumo de energía eléctrica doméstica “están llegando al doble”.
El ex candidato presidencial entregó a los coordinadores del PRD, Javier González Garza; del PT, Ricardo Cantú, y de Convergencia, Alejandro Chanona Burguete, un sobre con el Programa para la defensa de la economía popular. Acciones en materia presupuestaria.
El esquema está dividido en tres rubros: reactivación económica, producción y empleo; estado de bienestar, y protección a los ingresos y el ahorro de los trabajadores. Todo con un costo de 369 mil millones de pesos.
En el primer caso plantea designar 55 mil millones de pesos a establecer precios de garantía en beneficio de productores rurales; 28 mil millones a construir tres refinerías para dejar de importar gasolinas, diesel y otros petrolíferos; 20 mil millones a la construcción de caminos de concreto en 100 ayuntamientos; 35 mil millones para dotar de servicios públicos a municipios pobres y zonas marginadas, lo cual impulsaría la industria de la construcción, y 12 mil millones a construcción de vivienda para familias pobres del campo y la ciudad.
En el segundo bloque, 25 mil millones en pensiones alimentarias para adultos mayores de 65 años en todo el país; mil 500 millones para la entrega inmediata de los ahorros a los ex braceros; 6 mil millones para becas mensuales, equivalentes a medio salario mínimo a todos los discapacitados pobres, 5 mil millones para apoyo a madres solteras, con el propósito de que sus hijos no abandonen la escuela.
Para el tercer bloque, 70 mil millones de pesos para subsidio a las gasolinas, diesel, gas y consumo de energía eléctrica doméstica; 16 mil millones a contribuir al congelamiento de precios de la canasta básica y de los servicios, y 53 mil millones a la protección contra pérdidas de los fondos de pensiones de los trabajadores.
López Obrador plantea en su propuesta que el total de esos recursos saldrían de la reasignación de 230 mil millones de pesos al ajustar a la baja la partida 1509 del PEF, de donde se obtendrían 4 mil 400 millones al reducir a la mitad los sueldos de Calderón y altos funcionarios, de los miembros del Poder Judicial, los consejeros del Instituto Federal Electoral y los magistrados del tribunal electoral. Y 12 mil millones de recortar a la mitad las dietas de senadores y diputados.
Añadió que otros 139 mil millones se podrían obtener del actual subejercicio del sector público, producto “de la mala administración y la incapacidad de operación gubernamental. No sólo se padece de corrupción sino también de ineptitud. Ni siquiera tienen capacidad para ejercer lo presupuestado. Cada año hay subejercicios, porque es un gobierno totalmente incapaz”. Calderón, remató, “ni manda ni gobierna”.
noviembre 07, 2008
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