Un trato distinto

por Isabel Dorado Auz

Fue el pasado 13 de Octubre cuando una serie de organizaciones decidimos convocar a una conferencia de prensa, enfrente del Palacio Municipal de Hermosillo, para externar nuestro desacuerdo con la intención de los actuales gobiernos, municipal y estatal, de desaparecer áreas verdes. Incluso, entregamos una solicitud de audiencia con el alcalde, entendiendo que es ésta autoridad la que debe defender nuestros derechos como ciudadanos hermosillenses.

Ante nuestra inconformidad, el trato de ambos niveles de gobierno fue muy distinto. El alcalde decidió hacer caso omiso a nuestra petición y decidió darle un trato burocrático que tuvo como consecuencia el ofrecer tal audiencia hasta el próximo mes de Noviembre. Con su actitud, el alcalde nos hizo recordar la soberbia de Eduardo Bours y nos dejó muy en claro que para quienes se manejan en el medio empresarial, el pueblo tiene que adecuarse a sus intereses personales y no están dispuestos a servir, como lo establece nuestra constitución, a los intereses de la sociedad. El gobierno del estado, por su parte, reaccionó en forma muy distinta en la persona del Secretario de Infraestructura y Desarrollo Urbano, José Inés Palafox Núñez, quien sin petición de audiencia previa, nos convocó a Dialogar la semana pasada.

Producto de nuestro primer encuentro, se acordó postergar los trabajos del Distribuidor Vial del Boulevard Morelos y se estableció una especie de tregua para continuar las pláticas este miércoles 27 de octubre. Sobre la mesa existen tres posibilidades: Que el gobierno del estado logre convencernos de las bondades de la obra y en consecuencia presente argumentos sólidos que justifiquen la destrucción del área verde; que nosotros logremos convencer al gobierno del estado de la importancia de preservar las pocas áreas verdes con que contamos; o bien, que producto de las pláticas se pueda consensuar una alternativa intermedia.

En ambos bandos, gobierno y agrupaciones ciudadanas existe el temor de que las pláticas no terminen en un buen acuerdo. De hecho, un funcionario de la secretaría de Gobierno externó su desconfianza en nuestro proceder respecto a que nos declararíamos victoriosos por lograr frenar las obras en el periodo perentorio acordado. Creo sin embargo, que tal nerviosismo se debe a que no estamos acostumbrados a vivir la democracia y que los acuerdos se tomen de frente a la ciudadanía en general. Entender que la participación ciudadana es fundamental en las acciones de gobierno y que iniciar este camino nos llevará a tener tropiezos, pero que si la intención es honesta, se obtendrán buenos resultados.

Es importante resaltar, entonces, que si bien esta protesta la iniciamos un grupo de organizaciones ciudadanas, nuestra pretensión es que cambiemos entre todos la forma de hacer política. No queremos, que a pesar del buen gesto de los funcionarios del gobierno del estado, las decisiones finales sigan siendo las mismas. Esto es, a nuevas actitudes tendrán que corresponder nuevas acciones. En tal sentido, externo mi deseo de que la reunión de este miércoles no nos lleve a tomar decisiones precipitadas y que el diálogo, aunque puede ser ríspido en algunos momentos, nos tiene que conducir a una madurez en la toma de decisiones. Muchos pensarán que estamos en lo correcto, pero habrá muchos que piensen que estamos equivocados, no le tengamos miedo a abrir un debate serio y exijamos a nuestras autoridades que haga realidad su slogan de campaña, porque todos creemos que un Nuevo Sonora solo será posible si lo vamos construyendo entre todos.