Por Jesús Peraza Menéndez
Destruyen a sus mejores ciudadanos, los que piensan y actúan
Gina Villagómez y Luis Ramírez, lograron obtener el cargo extrajurídico de delegados plenipotenciarios del PAN que les confirió el ex gobernador Patricio Patrón Laviada. Con esto cancelaron la vida académica, fundada en la reflexión, el diálogo democrático y sustentado para imponer una mayoría-automática-incondicional. No fueron elegidos por sus superiores capacidades sino por ser las más incondicionales, esto explica porqué no fue, no ha sido ni será convocada la Universidad, sus académicos, con la diversidad de sus disciplinas y experiencias para el desarrollo-humano-urbano en Yucatán. Ya no sólo desde una perspectiva empresarial-industrial-comercial, sino también humana y social que es donde está el rezago. Pero compraron a los más dispuestos para apoyar la ganancia a toda costa de negocios particulares del exgobernador, sus familiares, socios y amigos (son las redes de poder y secretos de familia; red en la que se ha integrado una nueva familia con sus secretos, la de los Ramírez-Villagómez).
Los investigadores panistas emplearon todos los recursos personales y de la Universidad Pública para darle continuidad al gobierno de Patricio Patrón, se emplearon sin reserva con el candidato panista Xavier Abreu. Perdieron frente a Ivonne Ortega, con este estrepitoso fracaso electoral, que no esperaban, del que no se reponen y para el que no se prepararon, han tratado de volver a su posición de privilegios que les había redituado tan buenos dividendos a costa de imponer la atrofia burocrática al CIR-sociales; Unidad que no se acerca ni por casualidad a las necesidades de la sociedad. No desarrollan la investigación ni las ciencias sociales y las humanidades, producen estudios monográfico-descriptivos que no proporcionan herramientas y elementos para elevar las condiciones de existencia de la sociedad yucateca. ¿Esa es su función, el simulacro para la omisión de la injusticia, la violación de los derechos humanos y la ganancia a toda costa?
Luis Ramírez siempre huidizo, temeroso, se ha mantenido en la oscuridad, en el anonimato, usa a otros (as) para expresarse, es un líder inflexible, sus incondicionales lo saben bien. A Gina Villagómez se la comen las ansias de poder, se exhibe, se aventura y amenaza. Le parece que el gobierno de Ivonne Ortega no cumple con la visión de la derecha panista, como esa de privatizar la Universidad Pública y poner a sus académicos a hacer negocios ilegales. La gobernadora ha dejado claro que respeta la autonomía, no desprecia la investigación científica como lo hizo Patricio Patrón, el que aprovechando su posición condicionaba los recursos económicos que le corresponden a la Universidad Pública obteniendo a cambio la omisión sobre su injerencia con la flagrante violación de la autonomía, para dejar operar a sus empleados-académicos como Luis Ramírez y Gina Villagómez. El exgobernador expresaba francamente su desprecio hacia la investigación, por los centros de la Universidad, que atiende a los humildes, lo que según él significa “gasto público”, “populismo” y no permite ganancias privadas con los negocios públicos, ese es el dilema.
Es la parte inhumana, dada la responsabilidad pública de servir y nos servirse de la Universidad. En voz del Señor Rector, en este último aniversario de su fundación (el número 86), se pronuncia por el desarrollo humano y social que en Yucatán representa un rompecabezas de trágicos contrastes entre la abundancia concentrada en pocas familias y la miseria de tantas que han trabajado por generaciones sin lograr una vida digna. ¿Cuánto, entonces, tiene que hacer la Universidad Pública con y por la sociedad y el CIR-Sociales para estar a la altura de este reto histórico, sin quedarse a la zaga repitiendo lo que ya se hizo, reduciendo la ciencia social a la estadística inhumana, a la alabanza incondicional de un modelo que naufraga y arrastra al desastre a la humanidad entera, lo que no se resuelve con ensayos monográficos sobre hechos que pudieron prevenirse, tener orientación más humana con una ciencia creativa y responsable, por más puntos que se obtengan del Sistema Nacional de Investigadores (SIN)?
La investigadora Gina Villagómez Vera representa una ideología y una posición política dentro de la Universidad, pero no se la puede imponer a la comunidad y las autoridades, la Universidad Pública no es un complemento del PAN ni de ningún partido. La Universidad se ha declarado apartidista hace varias décadas, es plural y abierta, esa es la esencia de su autonomía, la libertad de indagar, confrontar y crear, el pensamiento único envenena toda libertad de hacer y crear, que corresponde a toda institución pública dedicada a la formación, investigación y cultura que es sostenida por el esfuerzo social. No puede reducirse a ser coto del grupo de presión del Dr. Luis Ramírez con la propiedad de algún grupo empresarial-político que usa a la Universidad mediante este grupo de académicos-changarreros para sus fines privados. La Universidad Pública es patrimonio de la sociedad, su función es la riqueza de la diversidad, la creación y la experiencia para la fortaleza de la condición humana.
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